La tarta de queso es un dulce popular en todo el mundo. Existen varias variantes, como la tarta de queso de Nueva York, la tarta de queso sin horno y la tarta de queso clásica. Un sabor rico y cremoso con un toque ligeramente ácido y dulce. La textura es suave y densa. Pero ¿por qué detenerse allí?
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Únase a nosotros mientras exploramos las diferentes variaciones que inspira el Cheesecake, desde la receta clásica que conquistó el mundo hasta reinvenciones creativas, más saludables y sustentables que responden a las últimas tendencias de consumo.
¿Sabías que la Cheesecake es la tarta más antigua del mundo que aún disfrutamos hoy en día? Según la tradición, una tarta de queso blanca con miel ya se servía a los atletas durante la celebración de los primeros Juegos Olímpicos en el año 776 a.C. Pero la versión tal y como la conocemos fue creada inicialmente en 1545 con un queso francés como base para el relleno.
En 1872, un granjero lechero de Chester, Nueva York, intentó reproducir este queso francés, pero no funcionó como esperaba. Su resultado sería conocido más tarde como queso crema y cambió el Cheesecake para siempre.
La mayoría de las fuentes coinciden en que fue a Arnold Reuben, propietario de Reuben’s Restaurant and Delicatessen, a quien se le atribuye la creación de la tarta de queso neoyorquina que conocemos hoy en día en la década de 1920.
Reconocido ahora como uno de los dulces favoritos de Estados Unidos, el 30 de julio ha sido la fecha elegida en Estados Unidos para la celebración anual del Día Nacional del Cheesecake.